Las familias del Centro de Educación Especial (CEE) La Encarnación de Torrent vuelven a denunciar “incidencias” en el servicio de transporte escolar, ya que los buses “continúan llegando con rampas y barandillas que no funcionan correctamente”.
Cabe recordar que el servicio lo presta la UTE Escolar Valencia V5 –operado por empresas integradas mayoritariamente por el grupo gallego Monbus– a la que la Conselleria de Educación ha resuelto el expediente de imposición de penalidades abierto contra por las incidencias de servicio en el transporte que se produjeron en el inicio del curso escolar 2023-2024 y que afectaron a unos 1.300 alumnos y alumnas durante once días lectivos. La sanción global se acerca al medio millón de euros.
Desde el AMPA del colegio han expuesto que este jueves, nuevamente, “el autobús se ha averiado y muchas niñas y niños se han quedado sin asistir a clase“. Las familias también se quejan de que desde hace semanas reúnen minibuses “con espacios insuficientes para sillas y carros adaptados“.
“El pasado lunes pretendían cargar seis sillas en un espacio reducido para cuatro de un minibús, con los niños y las niñas pegadas en las ventanas y a las puertas de atrás, poniendo en peligro su seguridad”, afirman los progenitores en un comunicado distribuido por la Federación de asociaciones de madres y padres de alumnos (Fampa-València).
Además, añaden, los vehículos “continúan circulando sin los anclajes para sillas y carros correctos“. “Cuando los autobuses tienen incidencias –prosiguen– el alumnado tiene que esperar dentro del autobús hasta que llega el servicio técnico, sin aire acondicionado y con las elevadas temperaturas de estos días”.
Así mismo, denuncian retrasos que ocasionan que el alumnado en muchas ocasiones llegue tarde a las clases y también a casa en la hora de la salida, o autobuses que vienen de otras rutas. Esta situación provoca que pierden horas de clases especiales esenciales en su rutina o que se alteren sus horarios de toma de medicación.
ABSTENCIÓN ESCOLAR ALUMNOS SILLA DE RUEDAS
Desde el AMPA manifiestan que “todas estas situaciones, sumadas a la falta de gestión y a la comunicación nula con los responsables y representantes de la empresa, han provocado una abstención escolar elevada de alumnado usuario de sillas de ruedas“.
“Las familias están desesperadas ya que son incidencias que se repiten desde el mes de septiembre. Después de la sanción a la empresa y a casi dos meses de acabar el curso escolar, las incidencias continúan, con todo lo que esto supone para los niños y las niñas que tienen derecho en una educación de calidad”, recalcan.
El presidente de FAMPA-València, Rubén Pacheco, lamenta que “la Conselleria de Educación no acaba de entender que la sanción económica repercutirá en la calidad del servicio“. “Es necesario la eliminación del contrato con Monbus y la sustitución de esta empresa, para garantizar el derecho a una educación de calidad del alumnado“, asevera.