La sentencia que obliga al Ayuntamiento de València a declarar la plaza Honduras y sus alrededores como Zona Acústicamente Saturada (ZAS) ha caído por sorpresa y como un “mazazo” al sector hostelero de la zona sobre todo, por las consecuencias económicas que puede acarrear. Por ello, los servicios jurídicos de la Asociación de Hostelería y Ocio de Honduras estudian cómo van a recurrir esta decisión judicial. “Vamos a llegar hasta donde se pueda” asegura el portavoz de dicha entidad, Victor Fernández de Córdova.
Una solución para evitar más despedidos en sus plantillas después de que los restaurantes y bares de la zona hayan visto recortadas sus terrazas más de un 50% por la decisión del anterior gobierno municipal de reducir la masificación de terrazas y evitar la declaración de ZAS en plaza Honduras, tal y como señala Fernández Córdova.
Un recorte que no ha conseguido esquivar el fallo judicial, pero que si que ha provocado “un daño económico importante” en los establecimientos de la zona. De hecho, el portavoz Asociación de Hostelería y Ocio de Honduras asegura que su local ha pasado de tener 7 a 4 empleados en tan solo unos meses y que estás perdidas se empezarán a notar más ahora con la llegada del buen tiempo donde los clientes prefieren las terrazas.
“El momento fuerte de trabajar las terrazas es ahora, pero nosotros estamos limitados. Los clientes lo tienen tan sencillo como cruzar a la calle de enfrente que goza de 30 mesas. Tenemos pérdida de público y estamos viéndolas pasar” lamenta Fernández Córdova, que también señala que el gobierno municipal tomo estas decisiones “aprovechando” la salida de la pandemia en 2021 con una “explosión” de jóvenes en las calles. “Aprovechó un momento puntual para meternos estacada de muerte“.
Los botellones, las causas de un ruido que paga la hostelería
Del mismo modo manifiesta que el problema principal es el ruido y que el causante de ello no solo es la hostelería porque también les afecta en su trabajo porque “son los primeros que están a pie de calle”. “El ruido es el enemigo, pero se está haciendo ver que somos el problema del ruido, pero nosotros no lo somos” lamenta Fernández Córdova,.
“Si tienes a 50 personas en la calle en un parque armando escándalo, también nos están espantando la clientela” asegura el portavoz de la asociación hostelera, que además destaca la “falta de civismo” y el auge de los botellones como uno de los factores del ruido y pone como ejemplo que ahora mismo en el paseo marítimo de València es donde se están concentrando más jovenes y haciendo botellones y “ahí no están los locales de plaza honduras”. “Es un fenómeno social que no podemos solucionar cerrando y destrozando empleo“.
Así pues, piden al nuevo gobierno municipal poder abordar todos estos problemas, ya que con el anterior no consiguieron reunirse, y crear una mesa de diálogo con diferentes concejalías como Medio Ambiente, Seguridad Ciudadana e incluso con Alcaldía y los vecinos para buscar soluciones que puedan “atajar” el ruido de raíz y no poner “solo parches”. “Con el cambio de gobierno seria un buen momento intentar estudiar y buscar soluciones para el problema del ruido porque no viene asociado solo a la hostelería. Es un debate abierto desde hace mucho tiempo en València” explica.
“Queremos trasmitirles una realidad que está a pie de calle. Hay muchas fórmulas de solucionar esto, pero la Administración se tiene que mojar y tomar decisiones aunque no sean muy agradables o populares si quiere resolverlo y no ir parcheando como han hecho hasta ahora todos” señala.
Igualmente critican que la ZAS no pondrá fin al problema del ruido: “Ha habido distintas ZAS y verdaderamente no han funcionado lo que se implemento. Lo único que ha hecho ha sido destrozar el tejido empresarial y puestos de trabajo en la ciudad”. “Es necesario que nos sentemos a debatir el verdadero problema de las zonas porque si no cambiamos las reglas del juego dentro de cuatro días será el Cabañal o Cánovas” concluye.
