El pleno de Les Corts ha emitido este jueves una declaración institucional de apoyo a los funcionarios de prisiones, con el objetivo de reconocer su trabajo y comprometerse a la mejora de sus condiciones y de seguridad.
Esta declaración, presentada por Vox y suscrita por los otros tres grupos parlamentarios, llega tras el asesinato de la jefa de cocina de la cárcel de Mas d’Enric (Tarragona) por un preso que después se suicidó.
El parlamento valenciano muestra un respaldo unánime a los funcionarios y trabajadores de prisiones que “día a día trabajan en condiciones durísimas para mantener la seguridad y el orden en las instituciones penitenciarias“.
“Con pesar y dolor, lamentamos la reciente pérdida de una trabajadora de prisiones, una cocinera que perdió la vida en un acto de violencia gratuita. Este trágico acontecimiento nos recuerda una vez más, los peligros cotidianos que enfrentan quienes sirven en nuestro sistema penitenciario“, recoge la declaración, que ha leído en el hemiciclo la presidenta de la cámara, Llanos Massó.
En el texto, Les Corts muestran su preocupación por el aumento de la violencia dentro de las prisiones, “violencia que aumenta los riesgos para la seguridad de los funcionarios de prisiones, que tienen de por sí unas condiciones laborales y de seguridad precarias y por lo tanto la de los internos y la de la sociedad española“.
Ante esta situación, el parlamento valenciano llama a los poderes públicos a “brindar el respaldo necesario a los funcionarios y trabajadores de prisiones, dotándoles de los recursos adecuados, la instrucción conveniente, la mejora de sus medidas de seguridad y el reconocimiento debido a su autoridad para garantizar su integridad en el cumplimiento de su deber“.
“Llamamos a todos nuestros ciudadanos a unirse en solidaridad con los funcionarios de prisiones y todos los que trabajan en ellas para mantener la seguridad y el orden en nuestras prisiones, su sacrificada labor redunda en la seguridad de todos los españoles“, concluye la declaración.
El asesinato de Nuria, acuchillada en la cocina de la prisión tarraconense a manos de un interno que acto seguido se suicidó y que precisamente cumplía condena por asesinar a una prostituta a puñaladas, ha sido el revulsivo que ha levantado al colectivo de prisiones.
En Cataluña, desde el pasado jueves y hasta este lunes se cortaban los accesos a distintas prisiones de todo el territorio y también se concentraban frente a las puertas de sedes administrativas. El pasado viernes funcionarios penitenciarios acudían a las puertas de la Conselleria de Justicia donde marcaban los cristales con las manos pintadas de rojo y coreaban “consellera asesina”. Ayer miércoles, representantes sindicales se reunían con la vicepresidenta catalana, Laura Vilagrà, y este jueves alrededor de 80 trabajadores se han concentrado frente al Parlamento autonómico donde ha comparecido la consellera de Justicia, Gemma Ubasart.
En la Comunidad Valenciana, al igual que en otras comunidades que han seguido la estela de los compañeros catalanes, se celebraban minutos de silencio para expresar las condolencias tras el crimen pero también exigir mejoras en las condiciones laborales. Este lunes, los funcionarios se unían en cada provincia para cortar los accesos a las principales prisiones de la región valenciana. Los asistentes señalaban que estos actos no estaban relacionados con sindicatos sino que surgían de todos los empleados.
