Médicos del Mundo Comunitat Valenciana ha reclamado a las administraciones públicas, con motivo del Día Mundial de la Salud, un mayor compromiso para garantizar el acceso al sistema sanitario a las mujeres en situación de prostitución, víctimas de trata y explotación sexual, pues son “un colectivo vulnerable”.
La presidenta de Médicos del Mundo Comunitat Valenciana, Beatriz Beseler, ha indicado que “las mayores trabas que se encuentran las mujeres son las barreras para acceder a la tarjeta sanitaria, puesto que la mayoría de mujeres son migrantes en situación administrativa irregular que tienen dificultades para demostrar su lugar de residencia efectiva y empadronarse”. “Además, las mujeres tienen desconfianza a los profesionales sanitarios porque tienen miedo al rechazo”, ha añadido.
Beseler ha subrayado que las mujeres también encuentran dificultades en “los horarios para cumplir con los trámites; los horarios con las citas médicas, incompatibles con su disponibilidad; las facturaciones de servicios de atención sanitaria; los copagos de medicamentos, o las negativas a la atención en urgencias sin previo pago del servicio”.
“La normativa autonómica reconoce el derecho a la salud universal de todas las personas, pero todavía hace falta recordar que existe una instrucción específica para trabajadores sociales de los centros de salud que permite el acceso al sistema de salud sin necesidad de vincular el padrón a derechos para población especialmente vulnerable”, ha destacado.
Para Beseler es “urgente formar a los profesionales sanitarias para que sepan identificar a las mujeres en situación de prostitución y víctimas de trata, evitar su estigmatización y garantizar, de esta forma, una atención sanitaria adecuada, así como facilitar su acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva que las proteja de enfermedades y agresiones”.
Asimismo, la organización ha demandado “una formación e información accesible en varios idiomas para que las mujeres puedan conocer sus derechos” y acciones de “sensibilización para que la sociedad deje de señalar a estos mujeres y se defiendan en sus derechos”. También ha exigido “el reconocimiento de las mujeres en situación de prostitución como supervivientes de violencia de género para que sean protegidas como tal”.
IMPACTO DE LA SALUD FÍSICA Y MENTAL
La presidenta ha resaltado que el impacto en la salud de la prostitución, trata y explotación sexual, produce “efectos devastadores” en la salud física, mental y emocional. “Nos encontramos con mujeres que ven su salud física deteriorada por la falta de horarios racionales, de descanso o de alimentación adecuada”, ha apuntado.
“Las mujeres sufren agresiones físicas y sexuales, además de estar continuamente expuestas a enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados, por tener dificultades para acceder a métodos anticonceptivos”, ha matizado, al tiempo que ha concluido que “sufren depresión, ansiedad, despersonalización y estrés postraumático, debido al aislamiento, la soledad y la violencia a la que están sometidas”.
