La Academia de Cine ha confirmado el fallecimiento de Marisa Paredes, una de las figuras más emblemáticas del cine español, a los 78 años. Presidenta de la institución durante la guerra de Irak y protagonista de una reivindicativa ceremonia de los Goya en 2003, Paredes marcó un antes y un después en la historia de la interpretación en España.
Nacida en Madrid, su infancia transcurrió cerca del Teatro Español, donde desde niña soñaba con el mundo del espectáculo. A los 14 años debutó en el cine con Esta noche tampoco (José Osuna), y un año después se estrenó sobre las tablas. Sin embargo, su consagración llegaría en 1980 con Ópera prima de Fernando Trueba, iniciando dos décadas de oro en su carrera y convirtiéndose en una de las icónicas ‘chicas Almodóvar’.
Trabajó con cineastas de la talla de Pedro Almodóvar (Tacones lejanos, La flor de mi secreto), Guillermo del Toro (El espinazo del diablo), Roberto Benigni (La vida es bella) y Agustí Villaronga (El mar). Su talento también brilló en proyectos internacionales con Amos Gitai, Raoul Ruiz y Manoel de Oliveira, entre otros. Su última película, Emergency Exit de Lluís Miñarro, queda pendiente de estreno.
Comprometida políticamente hasta el final, Paredes alzó su voz en defensa de la cultura y contra la ultraderecha. En una entrevista reciente lamentó la pérdida de valores progresistas en la sociedad.
Galardonada con el Goya de Honor, el Premio Nacional de Cinematografía y la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, entre muchos otros reconocimientos, Marisa Paredes deja un legado de más de 75 interpretaciones memorables que serán recordadas por generaciones.
El mundo del cine, desolado por su partida, ha comenzado a rendirle homenaje. Pedro Almodóvar y su hermano Agustín han expresado su tristeza: “Estamos desolados por la noticia”.
El Presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, también ha querido mostrar su pésame en sus redes sociales por el fallecimiento de la conocida actriz.