La Delegación de OCU en la Comunitat Valenciana ha solicitado al Ayuntamiento de València el “desarrollo urgente de plazas reservadas para residentes, al menos en la misma medida que plazas de estacionamiento regulado para el resto de los conductores”, ya que aseguran que “solo 4 de las 19 zonas de la capital cuentan con este servicio, lo que impide compatibilizar la facilidad de rotación de plazas de aparcamiento en los barrios con más dificultades para estacionar con la necesidad de los residentes a disponer de zonas de aparcamiento a un coste razonable”.
Esta petición llega tras la aprobación el pasado martes de una moción para revertir los horarios de aparcamiento de vehículos en las zonas de estacionamiento regulado de la ciudad (ORA), que ahora pasará a ser de pago entre las 9 y las 14 horas y entre las 16 y las 20 horas. A partir de ahora será gratis entre las dos y las cuatro de la tarde, y se adelanta su finalización, que estaba fijada en las nueve de la noche.
Solo las zonas de Ciutat Vella, Ruzafa, El Botánic y La Roqueta cuentan con plazas reservadas para residentes, sin embargo, aseguran que el resto, 16 zonas de estacionamiento regulado, carecen de ellas. “Y si bien es cierto que no todas las calles tienen plazas de pago, la demanda de aparcamiento es tan alta que a menudo los propios residentes no tienen más remedio que hacer uso de ellas y pagar entre 0,80 y 1,00 euro por hora (hasta un máximo de dos horas)” explican.
En este sentido, el organismo que recoge el malestar de los vecinos afectados, también lamenta que “no se haya aprovechado el acuerdo del Pleno para reservar un porcentaje de plazas para residentes, tal y como se hace en otras ciudades”.
Del mismo, piden que “se rebaje el importe del abono, que actualmente tiene un coste de 86,20 euros al año. Un importe excesivo si se compara lo que se cobra en otras grandes urbes como Madrid y Barcelona, donde suman respectivamente 24,60 y 52,00 euros al año”.
Además, la Delegación de OCU en la Comunidad Valenciana considera que “estas propuestas son perfectamente compatibles con el desarrollo de medidas de movilidad sostenible, como el fomento del uso del transporte público y la bicicleta”.
