El gobierno del Ayuntamiento de València podría tener un nuevo inquilino en los próximos días. Y es que el pacto entre el Partido Popular y Vox para que la formación ultraderechista entre en el gobierno municipal cada vez está más cerca, e incluso podría materializarse en el cualquier momento, sobre todo después de que el partido de Santiago Abascal votase ayer a favor de las ordenanzas fiscales en la Comisión de Hacienda.
Un primer gesto que la alcaldesa de València, Maria José Catalá, vio con buenos ojos y con el que los “socios preferentes” volvieron a tener sintonía tras el tono más “beligerante” de las últimas semanas del portavoz de Vox, Juanma Badenas, que llegó a condicionar el respaldo a la rebaja fiscal a su entrada a la gobernanza de València.
Un esperado pacto que muchos ya dan por cerrado y otros tildan de “inminente”, pero que fuentes municipales consultadas por Actualidad Valencia “ni confirman ni desmienten”. Se espera que el acuerdo sea proporcional a los resultados de las elecciones municipales de mayo, en las que el PP ganó las elecciones y sacó 13 concejales, mientras que Vox tan solo obtuvo 4 ediles. Eso sí, los de Santiago Abascal quiero ocupar sitios que tengan que ver con la gobernabilidad y el futuro de los valencianos y valencianas.
Por otro lado, la nueva postura del gobierno de Catalá respecto a la negociación del convenio con el Valencia CF, también podría haber “desatascado” el pacto. De hecho, el portavoz de Vox en varias ocasiones ha mostrado su rechazo a renovar el convenio dado los “incumplimentos” del propietario del club valencianista, Peter Lim, con la ciudad.
La alcaldesa de València, María José Catalá, al ser preguntada por los medios de comunicación sobre el pacto con Vox en el Ayuntamiento durante la Cumbre de Ministros, ha respondido que “es posible que próximamente tengamos un acuerdo de gobernabilidad”.
La primera edil ha asegurado que “vamos a esperar a ver qué pasa mañana. De momento las resoluciones de delegación no están firmadas”.
“Otro pacto del pollo”
Por su parte, el portavoz de Compromís y ex alcalde, Joan Ribó, ha manifestado que “32 años después en esta ciudad vamos a tener otro pacto del pollo pero ahora con un pollo puesto en la bandera de manos de Vox”.
“Parece que el noviazgo a escondidas que llevaban PP y Vox acabará en el altar, como ya veníamos advirtiendo y cómo ya han hecho allá donde han podido gobernar” ha indicado Ribó, que también cree que será “el acuerdo más ultra” de todos lo que ha firmado ambas formaciones en otros municipios y gobiernos de toda España.
Ribó también se ha preguntado si la “señora Catalá les concederá, como ha hecho hasta ahora en todo lo que ha pedido el grupo de Vox, las áreas más sensibles de la gestión municipal. “Esperamos que no sea así pero tenemos la sospecha de que lo será viendo la trayectoria del gobierno municipal del PP en los últimos meses con decisiones tan sectarias y acorde con la extrema derecha” ha manifestado.
“El pacto de la Vergüenza”
La portavoz socialistas en València, Sandra Gómez, ha exigido a Catalá que explique “qué le va a costar a los valencianos y valencianas su pacto de la VIU con Vox que tanto se ha esmerado en ocultar”. “Queremos saber los pormenores y la letra pequeña de este nuevo pacto de la vergüenza que Catalá ha rubricado en València. Debe explicar claramente a cambio de qué ha vendido el ayuntamiento de la tercera ciudad de España al grupo ultra que niega la violencia de género y el cambio climático”, ha manifestado Gómez tras trascender el “inminente” pacto entre el PP y la ultraderecha.
“Ya lo advertimos ayer, que el pacto estaba hecho y que la señora Catalá pretendía engañar a la ciudad de València. Finalmente, ha tenido que pegar ‘cabotà’ y admitir públicamente que ha llegado a un acuerdo con Vox para meterlos dentro del gobierno” ha indicado Gómez, que también ha indicado que “Catalá está demostrando con cada paso que da que es la alcaldesa del engaño y de la falta de transparencia. Ha certificado que no tiene proyecto propio para la ciudad y, lo que es peor, que no siente València. Por eso no le duele entregar la ciudad a la ultraderecha”.
Además, ha indicado que como valenciana le apena “tener una alcaldesa que abre las puertas del Ayuntamiento a la extrema derecha” y que se vaya a “trocear este Ayuntamiento y dejar en manos de los radicales”. “La ciudad está volviendo a un pasado oscuro en el que se da prioridad al coche, se da vía libre a la contaminación y se prefiere una ciudad gris y sucia a una verde y abierta al futuro” ha afirmado.
