El muerte de Fátima, la mujer de 34 años asesinada este miércoles en Sagunto, presuntamente, por su expareja, que ya había cumplido condena por un delito de maltrato en el ámbito familiar, está abriendo un debate que trasciende más allá de la tragedia y el delito.
De momento, lo que más preocupa es el grave estado de la hija de la fallecida, de 13 años, en coma en el hospital, tras precipitarse a un patio de luces, por causas que aún se investigan.
Sin embargo, el hecho de que el presunto agresor, un hombre de 39 que permanece detenido como supuesto autor de este asesinato, ya hubiera sido condenado anteriormente, suma unas circunstancias que tanto policial como socialmente se están analizando.
De momento, y según las informaciones que han trascendido, el detenido ya fue condenado en diciembre de 2016 y acabó de cumplir la condena en abril de 2018. Fuer a raíz de una sentencia del Juzgado de Instrucción número 1 de Sagunto, con competencias en materia de violencia sobre la mujer, por un delito de maltrato en el ámbito familiar.
Su condena consistió en 42 días de trabajos en beneficio de la comunidad, privación del derecho a la tenencia y porte de armas durante 16 meses y prohibición de aproximarse a la víctima a menos de 500 metros y de comunicarse con ella por cualquier medio durante 16 meses. Un sentencia que además se dictó por lo que se conoce popularmente como juicio rápido, tras una atestado policial.
Tres días de luto y minuto de silencio en Sagunto
El Ayuntamiento de Sagunto ha decretado tres días de luto oficial tras el asesinato machista vivido en el municipio en la tarde del 29 de noviembre y por tanto ha suspendido todas las actividades culturales, deportivas y festivas que estaban programadas para estos días.
Además, el alcalde de Sagunto y delegado de Igualdad, Darío Moreno, ha convocado un minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento de Sagunto a las 18 horas.
La sexta víctima en la Comunitat en 2023
En cuanto a las condenas al asesinato, venidas de todos los agentes sociales y políticos pese a repetirse como en casos anteriores, en esta ocasión, han estado ligadas de interpretaciones o demasiado políticas o incluso demasiado “arriesgadas”, por la posibilidad implícita de que puedan generar un efecto rebote en las víctimas o amenazadas, al dudar de la efectividad de los sistema de protección, según apunta personal que trabaja en contacto directo con las víctimas de este tipo de maltrato.
La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, se ha referido a este asesinato de Sagunto recordando que si se confirma que este crimen es violencia machista, serán seis las mujeres asesinadas en la Comunitat Valenciana en lo que llevamos de 2023. Por eso, Bernabé ha incidido en que “es necesario hacer un llamamiento a la ciudadanía en su conjunto, a las mujeres que se sientan amenazadas, para denunciar.
Hay que denunciar permanentemente cuando alguien se sienta amenazado. Las denuncias son las que garantizan que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado puedan seguir trabajando en combatir esa violencia que existe y que hay que nombrarla para combatirla. Es un tipo de violencia específica que se llama violencia de género”.
“No podemos consentir ni discursos negacionistas, ni miradas a otro lado, ni políticas tibias. Hay que elevar la voz, concienciar, poner en marcha todas las campañas de sensibilización y de protección de las mujeres en todos los ámbitos: municipal, autonómico y nacional.
La crítica pública de la consellera de Igualdad a los sistemas de protección
Por otra parte, las declaraciones de este jueves de la Consellera de Igualdad, cuestionando la efectividad de los sistemas de protección, ya han hecho saltar las alarmas por el efecto negativo que puedan causar.
Y es que la vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad, Susana Camarero, ha explicado en unas declaraciones en Las Corts que la fallecida “había estado en el sistema Viogen, pero a pesar de eso no se apreció que su situación fuese de riesgo, (…) porque contaba con un riesgo no apreciable, y eso no le ayudó. Creo que tenemos que todos hacer una reflexión de por qué estas mujeres que denuncian terminan siendo asesinadas”, ha añadido.
“Sin duda es un fracaso del sistema cuando esto ocurre, pero no quiero dejar de dar un mensaje de esperanza a aquellas víctimas que estén hoy escuchándonos en sus hogares. Hay salida a la violencia de género, hay asociaciones, instituciones, un gobierno detrás ayudándoles con instrumentos, con herramientas para salir del infierno de la violencia”, ha agregado.
