La ciudad de València tiene más de 4.600 alcorques vacíos, lo que supone un 7% de los 63.331 con los que cuenta actualmente la capital. De ellos, alrededor de 710 cuentan con árboles muertos y otros 3.919, están completamente vacíos en el año en el que la capital del Turia ostenta la Capitalidad Verde Europea.
Así lo ha asegurado el concejal de Compromís en el Ayuntamiento de València, Sergi Campillo, durante la rueda de prensa convocada para denunciar la situación del arbolado de la ciudad y “la falta de inversión” en proyectos de jardinería, en la que también ha presentado estos datos “desoladores y preocupantes” proporcionados, a fecha de 31 de marzo, a preguntas de la formación desde el área municipal de parques y jardines.
“Este gobierno que acaba de empezar parece un gobierno agotado y es profundamente mentiroso. Catalá prometió que no habría ningún alcorque sin árboles y acabaremos 2024, el año de la Capitalidad Verde Europea, con más de 5.000″ ha afirmado Campillo, que también ha alertado que “durante esta legislatura han caído o se han abatido cerca de 744 árboles“, los dos últimos en el centro de la ciudad dejando a tres personas con heridas leves.
Igualmente, ha recordado que “desde el gobierno de Joan Ribó dejamos unas contratas de jardinería reforzadas con más presupuesto para plantación. En concreto, el contrato del arbolado de viario aumentó un 80% respecto al contrato anterior del PP y también dejamos terminado un contrato de suministro de arbolado”.
En este sentido, ha indicado que en la campaña de plantación de árboles, que se ha desarrollado de noviembre de 2023 a mayo de 2024, se han plantado 2.052 árboles y que pese a ello, “se continuará con 4.000 alcorques vacíos en la ciudad y se llegará a los 5.000 con toda probabilidad, un 8% del total” porque seguirán cayendo árboles o abatiéndose por necesidad.
“Un 5% de los proyectos licitados”
Por otro lado, la formación valencianista ha criticado la “cifra irrisoria” de inversiones en materia de parques y jardines que ha realizado hasta la fecha el gobierno municipal. En este sentido, Campillo ha evidenciado que “a 31 de marzo en jardinería se habían ejecutado el 0 por ciento de las inversiones” y que “solo” se ha licitado un 5% de los proyectos de los 7 millones previstos, los huertos urbanos de Orriols -“que no están licitados pero están a punto”- y el Jardín de biodiversidad del Tramo VI del Jardín del Turia, un proyecto financiado con fondos Next Generation y que “dejó prácticamente finalizado el gobierno de Ribó”.
Además, el edil de Compromís ha lamentado que dejaron preparados 41 proyectos de presupuestos participativos, fondos europeos o jardines de barrio por valor de 7,3 millones de euros y que a día de hoy están “paralizados” como el Jardín Trini Simó o el Parque de Desembocadura que “Catalá ha mantenido 10 meses bloqueado porque estaba haciéndole una pensaeta”.
“Un tercio de los barrios de la ciudad tienen inversiones pendientes de ejecutar. Una situación de completo bloqueo en la ejecución de inversiones en infraestructura verde, en pleno año de la Capitalidad Verde Europea”, ha asegurado Campillo.
Ante esta situación de “parálisis”, Campillo ha insistido en la puesta en marcha de un Plan Director del Arbolado con “perspectiva climática” para ir sustituyendo las especies de árboles “más vulnerable”, así como el proyecto presentado por Compromís para la plantación de 20.000 árboles en los próximos años. “Desde nuestra experiencia de gobierno, después de haber plantado más de 13.000 árboles en 8 años, reiteramos que debería ponerse en marcha este plan específico priorizando, además, los árboles en las calles y plazas”, ha concluido.
“Situación muy grave”
Desde el otro grupo de la oposición en el consistorio, el PSPV-PSOE, la edil Elisa Valía ha asegurado que la infraestructura verde de la ciudad” está en una situación “muy grave”, al tiempo que ha señalado que “las políticas negacionistas de María José Catalá la han puesto en peligro al entregar su gestión a Vox”.
“Esto demuestra lo poco que interesan a Catalá las políticas de sostenibilidad y actuar contra los efectos del cambio climático en plena celebración de la Capital Verde Europea”, ha expuesto la dirigente valencianista tras visitar el ficus de Plaza de España que ha sido atacado recientemente y sobre el que ha censurado “la negligente gestión del gobierno de Catalá y, en particular, de su número dos, el portavoz de Vox, Juanma Badenas“, también edil de Parques y Jardines.
“En los tres primeros meses de 2024 no ha ejecutado ni un solo euro de los más de 14 millones que tiene para inversiones. Se le ha secado el abeto Italiano por el que pagó 10.000 euros de manera presuntamente fraudulenta” y “sigue sin dar ninguna explicación sobre la caída de árboles”, ha criticado.
Valía ha añadido que no se sabe “si se están produciendo más ataques” como el del ficus “en otros puntos de la ciudad porque Catalá y Badenas “no dan explicaciones”. “Después de un año queda claro que no se hacen con la gestión ordinaria de la ciudad. Catalá entiende que no está obligada a dar explicaciones y a rendir cuentas de lo que está pasando en una alarde de despotismo”, ha censurado.
Más de 34 alcorques vacíos en Ciutat Vella
Una situación que también han denunciado desde la Asociación vecinos y comerciantes Amics del Carme en sus redes sociales. De hecho, la entidad vecinal, recientemente, lamentó la caída de más de 136 árboles desde el inicio de la actual legislatura y criticó la falta de mantenimiento del arbolado y de los alcorques vacíos del barrio.
“Puede ser que los árboles de esta ciudad estén jugando al dominó o se hayan declarado en huelga de sombra. València tiene un problema con el mantenimiento de su arbolado, y parece que el regidor de Parques, Jardines y Espacios Naturales, Juan Manuel Badenas todavía no se ha dado cuenta. Si uno niega que el cambio climático es una realidad y no trata de hacerle frente, poca cosa se puede hacer”, señalaban desde Amics del Carme.
Además, criticaban la cantidad de alcorques vacíos que “están a la espera de ocupantes”. “Solo en Ciutat Vella, el Ayuntamiento ha informado que hay 34 alcorques pendientes de morador, y cinco más que se sacrificarán para poder ampliar terrazas, entre otras cosas” señalaba la entidad vecinal, que también alertaban que “el listado se quedaba bastante corto”, ya que habían más alcorques vacíos de los identificados por el consistorio.
“Los árboles nos ayudan a protegernos de las olas de calor, que se aventura que serán recurrentes en los años próximos; hacen bajar algunos grados la temperatura; y permiten hacer frente a las islas de calor que se crean en las ciudades por la mala planificación urbanística y el exceso de alquitrán. Pero parece que el nombramiento de València como Capital Verde 2024 solo ha servido para hacerse a foto con el nuevo Pantone ‘Verde Valencia'”, manifestaban.
