El Ayuntamiento de València ha ofrecido alojamiento a las familias de un edificio de la pedanía de Castellar-l’Oliveral. Este realoja a cuatro familias en el edificio Castellar, donde se han detectado defectos en los bajos. Este realojo de cuatro familias en el edificio Castellar es una medida necesaria.
Un total de cuatro familias, formadas por diez personas, han aceptado el realojo.
El consistorio ha señalado en un comunicado que se trata de un edificio ubicado en la Carretera Font de Bonet, 4. Este edificio «ya tenía problemas estructurales» antes de la dana que afectó a esta pedanía valenciana.
Este jueves, el departamento de Bomberos ha recibido aviso, se ha personado y ha tomado la decisión de desalojar preventivamente las ocho viviendas de este edificio. El consistorio realoja cuatro familias en el edificio Castellar.
Informe
El gobierno local ha detallado que el Departamento de Bomberos intervino en este edificio el 2 de noviembre de 2023. Los bomberos observaron la persiana de la planta baja con riesgo de desprendimiento. Comprobaron que se había salido de la gula y que el interior de la planta baja se encontraba apuntalado.
Además, ha agregado que existe un informe del Servicio de Disciplina Urbanística del 12 de diciembre de 2023. En este informe se determina que los propietarios del edificio «deberán proceder a la reparación de los daños descritos en este informe. También deben reparar otros daños en el mismo previa obtención de las correspondientes licencias y autorizaciones».
El mismo informe señala que se trata de un edificio de viviendas «de más de 50 años. Por lo tanto, la propiedad está obligada a realizar, por personal facultativo competente, el Informe de Evaluación del Edificio de Viviendas. Comunitat Valenciana (IEEV-CV)».
Además, agrega que, «una vez finalizados los trabajos de reparación, deberá remitirse a esta Oficina Técnica un certificado suscrito por el director de la misma. En este se debe especificar que, a su finalización, el edificio en su conjunto reúne las condiciones de seguridad, funcionalidad y habitabilidad, exigidas por la legislación».
El consistorio ha agregado que, el 31 de enero de 2024, los propietarios aportaron un certificado donde se señala que el apuntalamiento de planta baja se ha efectuado «como medida precautoria provisional para garantizar la seguridad estructural del edificio. Esto se ha hecho con pilares de hormigón armado dañados debido a la corrosión de sus armaduras» y que «con las medidas de seguridad existentes, el inmueble reúne las suficientes condiciones de estabilidad».
Dado el riesgo, este jueves los bomberos han decidido desalojar preventivamente el edificio. El consistorio ha confirmado que se realoja cuatro familias en el edificio Castellar.