El Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) ha presentado el resultado final de uno de sus proyectos más vanguardistas. En el Ciutat de Valencia e integrada en la camiseta oficial del Levante UD se ha presentado la nueva biopila desarrollada en el proyecto ENERGYM CELL para recolectar energía del sudor y usarla para alimentar dispositivos wereables en el ámbito de la monitorización personal como podrían ser smartwatch, pulsómetros, pulseras, incluso pequeños sensores que sirvan para monitorizar parámetros médicos.
La tasa de crecimiento de la práctica deportiva es cada vez mayor y los usuarios reclaman más y mejor información sobre sus progresos y estado fisiológico. Es por ello por lo que el uso de dispositivos electrónicos portables es un elemento clave tanto para deportistas aficionados como profesionales, puesto que permiten un seguimiento fácil de los entrenamientos, permitiendo almacenar y transmitir información cómodamente. Sin embargo, todos estos tienen un inconveniente: poseen una batería que debe cargarse periódicamente.
Es por ello que la recolección de energía (energy harvesting) juega un papel crucial para solventar esta cuestión. Se trata de un proceso para recoger energía limpia, renovable y permanentemente accesible a partir de fuentes alternativas a las pilas o baterías. Existen numerosas fuentes de energía con las que alimentar dispositivos sin depender de éstas y una de ellas es el cuerpo humano, que se recarga a través de los alimentos para realizar sus funciones.
ENERGYM CELL da un paso más en el acercamiento de la investigación sobre la tecnología de biopilas, que hasta ahora se había centrado en el uso de la glucosa como combustible, una molécula menos abundante y accesible que lactato en el sudor.
Durante más de un año se han evaluado diferentes métodos de deposición/impresión de materiales sobre soportes flexibles para la generación de unos novedosos electrodos para, posteriormente, someter a estos sustratos conductores a modificación químicas y/o biológicas para que puedan aplicarse a estrategias de energy harvesting para biopilas enzimáticas de sudor.
La jornada de presentación de resultados, celebrada en el estadio del Levante UD, ha contado con la presentación de Ignacio Casado, director de comunicación de ITE, y en la que han participado Joel Gambin, director médico del Levante UD; Laura García Carmona, responsable del proyecto ENERGYM CELL y Elena de la Llave, CMO en Ysabel Mora.
“Hemos creado electrodos en textil que pueden ser usados como (bio)sensores de tipo electroquímico y hemos comprobado que la biopila se alimenta con el propio sudor y funciona perfectamente. Vamos a seguir desarrollando este prototipo, pero ya hemos demostrado que con un poco de sudor podemos generar 3.5 voltios para alimentar un dispositivo”. Además, ha insistido en que una de las preocupaciones y retos a los que se han enfrentado es el de garantizar los lavados. Hasta ahora han constatado que a un lavado delicado el electrodo en aplicación de sensor de fatiga muscular resiste, y hay que trabajar en que el tejido, con la biopila incorporada, se pueda llegar a lavar sin dañarse.
A continuación, se ha presentado dos demostradores: la biopila funcional y una muñequera equipada con un novedoso sensor conectados a un microchip que se encargar de medir la resistencia del músculo según su actividad. Durante la mesa redonda, también ha salido a debate el coste económico de llevar este prototipo a escala real. “Los materiales utilizados para crear los electrodos son muy económicos. Este prototipo de desarrollo es compatible con la economía circular y es perfectamente escalable para que sea una realidad en el mercado”, ha señalado Laura García Carmona.
Este proyecto ha contado con la colaboración de las empresas: MySphera, BIOBEE, Lurbel y Gnesis EMS, que han contribuido con su conocimiento al éxito de esta nueva biopila alimentada por sudor. ENERGYM CELL tiene expediente IMAMCA/2023/9 e IMAMCA/2024/9, con solicitud de financiación por el Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (IVACE+i) mediante convenio de I+D con la Generalitat Valenciana dentro de las ayudas dirigidas a centros tecnológicos de la Comunitat Valenciana.