La Fiscalía reclama provisionalmente tres años de prisión multa e inhabilitación para un abogado al que acusa de estafar entre marzo y octubre de 2015 a más de 130 personas que le habían encargado a través de un sindicato la interposición de demandas contra la entidad bancaria Bankia por la adquisición de acciones preferentes con motivo de su salida a Bolsa en julio de 2011.
El acusado ingresó en concepto de provisión de fondos de cada perjudicado cantidades que oscilaban entre los 170 y los 242 euros, pero la Fiscalía sostiene que en lugar de cumplir el encargo se limitó a dirigir un escrito al servicio de atención al cliente del banco que resultó infructuoso en todos los casos, no presentó demanda alguna y perjudicó así con su inacción los intereses de sus clientes.
Los hechos, según el Ministerio Público, son constitutivos de un delito de deslealtad profesional y un delito de apropiación indebida.