La junta de gobierno local del Ayuntamiento de València ha aprobado una moción para iniciar las actuaciones para regular la actividad de alquiler de motos eléctricas en la ciudad, «que hasta ahora está funcionando sin una regulación específica«, tal como ha subrayado el concejal de Movilidad, Jesús Carbonell.
Con la aprobación de esta moción, el consistorio impulsará regulación de las motos de alquiler eléctricas sin conductor, donde «se determinará el número de motos que podrá implantar cada compañía para que sea un servicio óptimo y eficaz, a la vez que se dará la autorización demanial que hoy no tienen las compañías que operan en la ciudad, dado que hasta ahora las compañías ni tenían autorización«.
Carbonell ha defendido que este servicio «debe regularse, ya que es necesario en la ciudad, para que funcione de manera eficaz, dado además que ya supone una apuesta por un transporte alternativo no contaminante en la ciudad«, según ha indicado el consistorio en un comunicado.
«Su implantación eliminará de las calles vehículos privados a motor contaminantes, por lo que reducirá tanto la contaminación atmosférica como acústica«, ha recalcado el edil.
El consistorio ha indicado que el artículo 60 de la vigente Ordenanza de Movilidad, aprobada en el año 2019, regula los sistemas de alquiler de vehículos sin persona conductora y sin base fija (motosharing) y prevé que las empresas obtengan autorización demanial para el ejercicio de dicha actividad económica.
Igualmente, el Ayuntamiento añade que, durante el mandato anterior, en el año 2021, el anterior gobierno inició las actuaciones para regularizar la actividad económica, que se venía prestando en la ciudad sin autorización demanial.
«Sin embargo, al establecerse un número máximo de 133 vehículos por empresa prestadora, se generó una agria polémica con el sector del motosharing, que cuestionaba la viabilidad de la actividad como consecuencia de dicha limitación», ha afirmado el concejal.
Posteriormente la Asociación Española de la Economía Digital (ADIGITAL), así como la Asociación de Empresas para el desarrollo e impulso de la movilidad eléctrica (AEDIVE), asociaciones representativas de los operadores económicos dedicados al sector de la movilidad urbana, presentaron ante la Secretaría del Consejo para la Unidad del Mercado una reclamación contra la limitación del número de vehículos.
El consistorio ha indicado que este órgano concluyó que el requisito de que cada operador no pudiera tener más de 133 vehículos (siendo 2.000 el total de los desplegados por la ciudad), debía hacerse teniendo en cuenta el principio de necesidad y proporcionalidad.
«El Ayuntamiento de València no resolvió la reclamación, que quedó desestimada por silencio administrativo, pero desistió de llevar adelante la regulación de la actividad en la ciudad de València», ha agregado el edil de Movilidad.
Carbonell ha subrayado que el motosharing es «una alternativa eficiente y sostenible para la movilidad en la ciudad, que contribuye a la reducción del uso de vehículos privados a motor, y que reduce la contaminación atmosférica y acústica a través de una movilidad más respetuosa con el medio ambiente».
«Desacredita» el trabajo de técnicos
Tras la aprobación de esta moción por parte de la junta de gobierno local, el concejal de Compromís Giuseppe Grezzi ha calificado de «muy preocupante» que Carbonell «se arrogue la potestad de regular la actividad de las empresas de alquiler de motos después de dos años en los que, en el ejercicio de sus competencias, ha sido incapaz de poner coto al estacionamiento ilegal de las motos de sharing en las aceras y calles peatonales de la ciudad, que es un auténtico escándalo y una molestia para los vecinos de València».
En este sentido, ha considerado que la responsabilidad de regular la actividad de estas empresas es del concejal Juan Giner, titular de Actividades, quien «en dos años no ha hecho nada con el trabajo que desde Movilidad Sostenible realizamos para la correcta implantación del servicio de motos de sharing, pero posibilitando su control y garantizando lo mejor para los vecinos, al igual que se hizo con la limitación del sharing de patinetes, con unas medidas que copiaron ciudades de toda Europa».
«Eso no es motivo para que ahora Carbonell, que como titular de Policía está permitiendo campar sin control infringiendo todas las ordenanzas municipales, asuma el protagonismo de la regulación, desacreditando además el trabajo realizado por los técnicos municipales y calificándolo de muy restrictivo», ha aseverado Grezzi, al tiempo que ha añadido que «es normal que los vecinos se estén echando ya a temblar».